Discernimiento Espiritual
DISCERNIMIENTO ESPIRITUAL
Debemos hacer guerra espiritual también en el campo del Discernimiento; ya sea discernimiento mental,( conocimiento humano -ojos naturales-) y discernimiento espiritual, ( conocimiento sobrenatural y divino -ojos espirituales-). Porque como soldados del ejercito de Dios debemos movernos en todo lugar y toda circunstancia en una actitud de alerta y pronto combate contra toda acechanza del enemigo, ya que el anda buscando a una presa débil, descuidada y alejada de la manada a quien pueda atacar. “Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar;” 1pedro 5:8.
Este Don de Dios nos permite diferenciar entre lo humano y lo espiritual; entre la verdad y el error; entre la luz y las tinieblas; entre lo bueno y lo malo, entre la sabiduría natural(humana) y la sabiduría que proviene de lo alto; entre lo que es de Dios y lo que no es de Dios. Es decir nos permites juzgar, distinguir, discriminar entre una cosa y otra, por lo cual esta íntimamente relacionado con el conocimiento y por ende con el discernimiento mental. Implica poseer una visión espiritual para revelar sobrenaturalmente los planes y propósitos del enemigo y sus fuerzas.
Distinguimos la naturaleza, la identidad, la actividad entre espíritus; falsos sueños y profecías; falsos profetas, falso maestros y doctrinas; diferenciamos entre lo santo y lo profano, distinguimos el espíritu de verdad y el espíritu de error; diferenciamos entre hijos de Dios e hijos del mundo.
Puede revelarse a nosotros mediante un pensamiento, una impresión, un sentimiento, un sueño, una visión, etc.; son diversas las maneras que el Espíritu de Dios utiliza para advertirnos, alertarnos y revelarnos lo que el desea.
Este Don de Dios nos permite diferenciar entre lo humano y lo espiritual; entre la verdad y el error; entre la luz y las tinieblas; entre lo bueno y lo malo, entre la sabiduría natural(humana) y la sabiduría que proviene de lo alto; entre lo que es de Dios y lo que no es de Dios. Es decir nos permites juzgar, distinguir, discriminar entre una cosa y otra, por lo cual esta íntimamente relacionado con el conocimiento y por ende con el discernimiento mental. Implica poseer una visión espiritual para revelar sobrenaturalmente los planes y propósitos del enemigo y sus fuerzas.
Distinguimos la naturaleza, la identidad, la actividad entre espíritus; falsos sueños y profecías; falsos profetas, falso maestros y doctrinas; diferenciamos entre lo santo y lo profano, distinguimos el espíritu de verdad y el espíritu de error; diferenciamos entre hijos de Dios e hijos del mundo.
Puede revelarse a nosotros mediante un pensamiento, una impresión, un sentimiento, un sueño, una visión, etc.; son diversas las maneras que el Espíritu de Dios utiliza para advertirnos, alertarnos y revelarnos lo que el desea.
Es la única manera por medio de la cual nosotros podemos reconocer y conocer las verdades espirituales,solo mediante el Espíritu Santo de Jehova.
Gracias a el podemos percibir, detectar, diferenciar la naturaleza de un determinado espíritu, situación, enseñanza, etc.; discernimos con nuestra mente pero mayor aun con nuestro espíritu en el Espíritu Santo. Estamos siendo transformados en nuestro entendimiento y simultáneamente crecemos en el discernimiento espiritual de las verdades de DIOS.
“12 Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido,13 lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual. 14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.15 En cambio el espiritual juzga todas las cosas; pero él no es juzgado de nadie.16 Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.” 1 Corintios 2:12-16.
La única manera de conocer las verdades espirituales que nos muestra la Biblia, la palabra profética, el estudio bíblico y el andar en la vida cristiana; es solamente posible mediante el Discernimiento Espiritual dado por el Espíritu de Dios.
Examinemos el pasaje bíblico siguiente:
“16Aconteció que mientras íbamos a la oración, nos salió al encuentro una muchacha que tenía espíritu de adivinación, la cual daba gran ganancia a sus amos, adivinando. 17Esta, siguiendo a Pablo y a nosotros, daba voces, diciendo: Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de salvación. 18Y esto lo hacía por muchos días; mas desagradando a Pablo, éste se volvió y dijo al espíritu: Te mando en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella. Y salió en aquella misma hora.” Hechos 16:16-18.
He aquí un caso claro que puede presentarse en nuestra vida cristiana. Esta muchacha decía: “Estos hombres son siervos del Dios Altísimo”; lo cual, era totalmente cierto y cualquiera pudiera agradarse de esta declaración, pero el problema real es que era un ser humano en quien operaba un espíritu de adivinación. Pablo soporto lo que decía ella , pero lo que no le agrado fue que ella fuera prisionera espiritual de esta situación. Por lo cual en el nombre de Jesús la hizo libre de esta esclavitud espiritual y libre también de esta esclavitud humana, porque sus amos obtenían ganancia a traves de ella.
Es importante lo que puedes tu discernir con tu mente natural, pero muchísimo mas importante y poderoso es lo que el Espíritu Santo puede revelarte a través del discernimiento espiritual. No solo puede revelarte la naturaleza en una determinada situación, sino que te instruye y capacita para que acciones correctamente según la voluntad de Dios.
Ahora si nos ocupamos de discernir la Cena del Señor, debemos profundizar en lo que es el Cuerpo de Cristo, que es su sangre y que es su carne. Ciertamente hay un conocimiento de su sacrificio y muerte; resurrección y segunda venida que yo se que hay en tu mente y en tu corazón. Pero si sabes también que el Conocimiento de Dios es infinito, entenderás en tu corazón que hay cosas que el Espíritu Santo quiere dar a conocer en estos tiempos y habrá un anhelo indescriptible el cual te llevara a buscarlas.
Porque si pensáramos que ya lo sabemos todo es como considerar que Dios es pequeño; yo te invito en el nombre de Jesús a esforzarte y buscar cada vez mas esa sabiduría que viene de lo alto, porque ella supera nuestras capacidades y vida natural, para llevarnos a la multiforme sabiduría de Dios.